Al abandono de las calles de La Canyada ahora también gravilla suelta
Según la asociación vecinal durante las últimas semanas, el barrio de La Canyada ha enfrentado una situación preocupante relacionada con las obras de canalización de instalación eléctrica que se están llevando a cabo en las calles 16 y San Vicente Ferrer. Estas obras, a cargo de una subcontrata de una empresa eléctrica, han generado la presencia de gravilla en la calzada, lo que ha suscitado inquietud entre los residentes.
Los vecinos lamentan, que la zanja excavada para la canalización eléctrica no ha sido debidamente finalizada con bituminoso caliente, tal como lo indican las instrucciones proporcionadas por la empresa eléctrica para la terminación adecuada de la canalización en las calzadas. Aunque se aplicó correctamente el bituminoso caliente en un tramo específico de la calle 16, entre las intersecciones de Barranco del Rubio y calle 302, este cuidado no se ha extendido al tramo adyacente de la calle 16, ni tampoco al tramo correspondiente a la calle de San Vicente Ferrer, donde la zanja ha sido rellenada con hormigón hasta el nivel de la calzada.
Esta problemática se agrava debido a que los vehículos que circulan o estacionan sobre el hormigón están liberando gravilla, creando una superficie potencialmente peligrosa para los usuarios de vehículos de dos ruedas o los peatones que transitan por la zona. La acumulación de gravilla en la calzada representa un riesgo significativo para la seguridad vial y aumenta la probabilidad de caídas y accidentes.
Es importante destacar que tanto la Normativa municipal como el Plan General de Ordenación Urbana establecen la obligación de dejar la calzada en condiciones similares a las originales, lo cual no se está cumpliendo cuando el remate de las zanjas, una vez finalizadas, se realiza con hormigón en bruto, generando una superficie irregular y muy peligrosa.
Desde la Asociación Vecinal de La Canyada, hacemos un llamado a la empresa eléctrica responsable y a su subcontrata para que tomen las medidas necesarias y corrijan esta situación a la brevedad posible. Es fundamental que se utilice bituminoso caliente en todos los tramos correspondientes para evitar la generación de gravilla en la calzada y, en consecuencia, prevenir accidentes y caídas.
La falta de calidad en el remate de zanjas durante las obras de canalización en La Canyada ha puesto de relieve un problema frecuente en empresas que realizan instalaciones subterráneas, donde los parches de asfalto utilizados para sellar las zanjas son poco estables y se desintegran rápidamente. Por ello, es necesario que los servicios de obras del Ayuntamiento supervisen tanto el inicio como el final de las obras para garantizar la seguridad vial y evitar situaciones peligrosas. Las empresas responsables deben tomar medidas correctivas para prevenir futuros riesgos y asegurar la calidad de las obras.
Asimismo, instamos a los técnicos responsables locales a supervisar el cumplimiento de la Normativa municipal y a exigir el acabado adecuado de las zanjas tras la finalización de las obras de canalización. Hemos recibido la preocupación de varios ciudadanos que se han puesto en contacto con la asociación vecinal, y esperamos que desde el Ayuntamiento se tomen las acciones necesarias para resolver este problema de manera pronta y efectiva.
Finalmente, agradecemos a los residentes del barrio su comprensión y paciencia mientras se aborda esta situación y se trabaja en la implementación de las medidas correctivas necesarias para asegurar la seguridad de todos y todas. Mantendremos al barrio de La Canyada informado sobre los avances y esperamos que esta preocupación sea atendida con la celeridad que merece.
